La Crónica desde Soria

SORIA: JOSELITO ADAME A HOMBROS CON CAYETANO

MARIANO ALIAGA / HIDROCÁLIDO

Esta España maltratada por los hijos de los euros que primero nos apretaron el cinturon y ahora ahogan la garganta, empieza a hervir en fiestas populares clasicas y tradicionales en capitales de provincias dando paso a la cumplida celebración de las corridas de toros siendo éstas la parte fundamental de sus eventos festivos. Ni los hijos de los euros ni la madre que los imprimió han conseguido que esa garganta a punto de cerrarse se refresque con los consumos habituales en fiestas dando paso al colorido de peñas y aficionados acudiendo a las plazas para disfrutar de su afición favorita. Ayer tocaba Soria, pequeña, semi olvidada, pero entrañable y recordada por quien la visita, donde un empresario audaz ha conseguido reunir en tres ramos a las flores más punteras del escalafón obteniendo el reconocimiento de medios que alabaron y públicos que llenaron.Entre las rosas floridas, algún capullo sin abrir o querer abrirse, pero sobre todo unos pétalos de blanco verde y rojo que conforman el alma mexicana de Joselito Adame que ayer volvió a dejar sus credenciales en audiencia multitudinaria como embajador de la verdad, frescura y variedad del toreo azteca, aquí donde herederos de formas repetitivas y empalagosas, aburren hasta al más optimista.Con los toros de Parladé, antes vimos al rey del indulto, Enrique Ponce, maestro en inteligencia, conocimiento y compostura, mantener a un inválido supremo durante los dos primeros tercios para evitar sobrero y luego justificarse ante lo injustificable en la muleta con su primero, sacarse al segundo evitando la repetición que permite ligar sin querer perderle los pasos necesarios y recetar un bajonazo a cada uno con oreja en el que cerraba su lote como premio a una insistencia sin resistencia, a Cayetano con un toreo clasico pero despegado en el segundo con olés de fans admiradoras de rostro y no de arte dejando al aire carencias de rápida trayectoria que apuntan al corregirlas a figura importante, desapercibidas al público entregado al guapo que pasa el toro y que le concede dos orejas tras una estocada para muestra en escuelas. El quinto no le dio ni la más mínima opción de faena.Y llega Joselito en el tercero y se pone a pies juntos instrumentando verónicas hasta el platillo, y lo lleva al caballo rematando con una media y hace un quite ceñido con los gritos de preocupación por su integridad en los tendidos que ya entonces se habian percibido de cual es la verdad de esto. Estatuarios con remate de la firma para que suene la banda que acompañó las tandas por derecha e izquierda, incluso el redondo invertido y las manoletinas finales dejando claro su mando. Estocada y dos orejas que le abrían la puerta grande aquí que es imprescindible cortarlas en un toro para salir por ella. Después del tedio de cuarto y quinto, vuelve el hidrocálido a soplarnos aire en la nuca para despertar del letargo con su quite por zapopinas que encandila y predispone para el último tercio donde vuelve a la carga con toreo largo y profundo aunque en series cortas para no agotar al de enfrente. Fallo con la espada que le priva de otros dos trofeos pero para que se hagan una idea de la entrega del público sepan que tras el cuarto desafortunado pinchazo le dedicaron una enorme ovación de ánimo, consuelo y solidaridad.Y a hombros junto con el torero guapo, pero los dos en la foto.