jueves, 5 de mayo de 2011

Sevilla_Crónica : José Antonio del Moral





10ª de feria en Sevilla. Sin continente ni contenido

Aburridísimo resultó el décimo festejo de esta feria que, desde el histórico triunfo de Manzanares, parece que ha entrado en barrena a la espera de lo que el alicantino haga el viernes. Por primera vez en muchos años, además, no se llenó la plaza en un miércoles de farolillos. Claro que en ello contó lo mal rematado del cartel con la inclusión de Matías Tejela que pasó el trance con más pena que gloria pese a como le embistió el primer toro, el único posible del flojísimo envío de Fuente Ymbro que desaprovechó. Miguel Ángel Perera, tan valiente como siempre, se estrelló con su deslucidísimo lote. Y a cargo de Alejandro Talavante corrió lo poco bueno que vimos con la muleta mientras duró el tercer toro.

Sevilla. Plaza de la Real Maestranza. Miércoles 4 de mayo de 2011. Décima de feria. Tarde calurosa con dos tercios de entrada.Siete toros de Fuente Ymbro incluido el sobrero que reemplazó al quinto, devuelto por derrengado. Bien aunque desigualmente presentados, nobles en distintos grados y muy flojos. El primero romaneó en varas al tiempo que blandeó, pero fue noble y repetidor. El segundo peleó con genio en el caballo y resultó muy incierto en la muleta. Blando y con clase aunque muy pronto rajado el tercero. Sin fuerza, noble y enseguida parado el cuarto. Sin la más mínima energía ni casta el quinto que se vino abajo nada más salir. Y poderoso aunque enseguida arruinado el sexto. Matías Tejela (blanco y oro): Buena estocada, palmas con saludos. Metisaca, pinchazo y estocada, silencio. Miguel Ángel Perera (encarnado y oro): Pinchazo y otro hondo caído que se hunde y descabello, silencio. Pinchazo, casi entera y descabello, silencio. Alejandro Talavante (blanco y plata): Dos pinchazos, estocada corta tendida y descabello, silencio. Estocada tendida, silencio.

Menos mal que al menos uno tiene que atravesar el Puente de Triana todas las tardes al ir y al volver de la Maestranza. Sobre todo en las malas tardes como la de ayer y van… La sin igual belleza de paisaje fluvial y urbano nos compensa de todo y hasta nos reconforta haya sido la corrida como fuere. Da lo mismo que haga sol o que esté nublado, que haga frío o calor. Lo que se ve desde el famoso puente siempre nos deja absortos en cualquier época de año, sea de día, tarde o noche. Hasta callendo chuzos merece la pena detenerse un minutito.

Hoy tengo que recurrir a estas bonitas sensaciones porque en la plaza no vimos casi nada que mereciera la pena. Si a caso, lo templados y personalísimos muletazos que dio Alejandro Talavante en su forzosamente corta faena al tercer toro de la infame corrida de Fuente Ymbro que, desgraciadamente, volvió a fracasar como en Castellón después del excelente envió que llevó a Valencia por las Fallas.

Otra vez tengo que frotarme los ojos pensando en cómo es posible que esta prestigiosa ganadería esté lidiando encierros tan diametralmente opuestos. Habrá que esperar a ver más corridas del mismo hierro para ver cuales predominan, si las buenas o las malas. La de ayer, aparte su muy desigual presentación, toros bonitos junto a otros de exagerada envergadura como los dos últimos, careció en su mayoría de fuerza y de casta aunque hubo un buen primero. Nada del otro mundo pero más que posible, y un sexto equívoco por su inicial poderío que enseguida se aplomó.

Este buen primer toro tuvo la desgracia de caerle a Tejela que anda tan vulgar y cansino como si en vez de llevar ocho años de matador de toros, fueran cuarenta o cincuenta los que lleva toreando. Pero así está el panorama de la segunda y tercera filas del toreo presente, las peores de la historia aunque algunos de los que la integran continúen toreando por aquello del cambio de estampitas entre los empresarios que también son apoderados.

No hay comentarios: